"En
el pasto de este mundo, incesantemente aparto las hierbas altas en
búsqueda del toro. Siguiendo ríos sin nombre, perdido en los senderos
entrecruzados de montañas distantes, con mi fortaleza fallándome y mi
vitalidad exhausta, no puedo encontrar al toro. Solo oigo las cigarras
chirriando en el bosque por la noche"
Existes,
y tienes vida, pero no sabes que es la vida. Tienes la energía, pero
no sabes de dónde viene esta energía y hacia que meta va esta energía.
Eres esa energía, pero todavía no eres consciente de lo que es esa
energía. Vives ignorante. No has
hecho la pregunta básica ¿Quién soy? Esa pregunta es lo mismo que la
búsqueda del toro.¿Que son las hierbas altas? La poesía habla en
símbolos. La pintura pinta los símbolos, la poesía dice los simbolos.
Los deseos son las hierbas altas en las que se ha perdido tu toro.
Tantos deseos, arrastrándote hacia un lado u otro. El dinero atrae, el
poder atrae, y sin preguntarse a uno mismo ¿Por qué correr tras estas
cosas?, seguimos corriendo. De hecho, como la sociedad entera esta
corriendo, todos los niños reciben esa enfermedad como herencia. Todos
están corriendo, el niño aprende por imitación. El padre está
corriendo, la madre está corriendo, el hermano está corriendo, el vecino
está corriendo, todo el mundo esta corriendo, tras poder, prestigio,
dinero, cosas del mundo. Sin que se de cuenta, también se fuerza al
niño a entrar en la corriente principal de la vida. Antes de que el
niño pueda empezar a pensar, ya está corriendo. Es como si alguien
tuviera sed y le pusiéramos en un sendero que conduce a más y más
dinero. Llega, lucha duro, acumila mucho dinero, pero el dinero no
tiene nada que ver con la sed. Entonces, de pronto se siente frustrado.
Observa cual es tu necesidad interna, y luego esfuérzate por ella, y esfuérzate diligentemente por ella, inteligentemente por ella. Si puedes comprender la cualidad de tu energía, serás capaz de comprender que es lo que va a satisfacerte. Si no, sin concoerse a uno mismo, uno sigue corriendo. La carrera es casi loca.
Hay que entender algo muy básico: estas cosas no van a satisfacerte porque no son necesidades básicas. Uno necesita otra cosa. Pero esa otra cosa hay que buscarla dentro de uno mismo; nadie más puede indicarte la dirección. Pero la gente tiene miedo de ser ella misma. La gente tiene miedo de ser ella misma porque si intentas ser tú mismo estarás solo. Todo el mundo es único y esta solo. Si intentas ser tu mismo, sentirás soledad. Si meditas, estarás solo, y si te vuelves loco tratando de conseguir dinero nunca estarás solo, el mundo entero va en esa dirección. Si buscas a Dios, estarás solo; pero si buscas la política, el poder, entonces el mundo entero estará ahí, nunca te dejarán solo.
En la segunda parte del poema Kakuan dice: SIGUIENDO RIOS SIN NOMBRE…. Si sigues las escrituras, estas siguiendo ríos que ya tienen nombre. Si sigues cierta religión, secta, iglesia, entonces tienes un mapa, y la verdad no puede tener ningún mapa. No puede haber ningún mapa porque la verdad es privada y no pública. Los mapas se hacen públicos; son necesarios para que también otros puedan seguir. En el mapa se muestran las autopistas, no los pequeños senderos para caminantes; y la re ligión es un sendero, no una autopista. No puedes llegar a Dios como cristiano o hindú o mahometano. Puedes llegar como tu, auténticamente tu, y no puedes seguir el camino de nadie. Y llega un momento en la búsqueda en el que uno se siente completamente exhausto, cansado. Uno empieza a pensar que hubiera sido mejor no haber empezado esta búsqueda. Uno se siente tan frustrado que empieza a tener celos de los que nunca se han preocupado por estas cosas. Esto es natural, pero es ese exactamente el momento en el que comienza la autentica búsqueda. Por eso nunca ves hippies de más de 35 años. Para entonces ya están cansados. Para entonces ya empiezan a pensar en casarse, establecerse, tener una casa. Para entonces ya empiezan a volverse serios. Para entonces ya se han olvidado de su revolución, se hacen parte del status quo; cansados, exhaustos. Es un momento esencial. Y si puedes continuar, incluso sintiéndote exhausto, cansado, frustrado, si aún puedes seguir hacia adelante, entonces se abandona la mente y aparecen los primeros atisbos de la meditación.
Observa cual es tu necesidad interna, y luego esfuérzate por ella, y esfuérzate diligentemente por ella, inteligentemente por ella. Si puedes comprender la cualidad de tu energía, serás capaz de comprender que es lo que va a satisfacerte. Si no, sin concoerse a uno mismo, uno sigue corriendo. La carrera es casi loca.
Hay que entender algo muy básico: estas cosas no van a satisfacerte porque no son necesidades básicas. Uno necesita otra cosa. Pero esa otra cosa hay que buscarla dentro de uno mismo; nadie más puede indicarte la dirección. Pero la gente tiene miedo de ser ella misma. La gente tiene miedo de ser ella misma porque si intentas ser tú mismo estarás solo. Todo el mundo es único y esta solo. Si intentas ser tu mismo, sentirás soledad. Si meditas, estarás solo, y si te vuelves loco tratando de conseguir dinero nunca estarás solo, el mundo entero va en esa dirección. Si buscas a Dios, estarás solo; pero si buscas la política, el poder, entonces el mundo entero estará ahí, nunca te dejarán solo.
En la segunda parte del poema Kakuan dice: SIGUIENDO RIOS SIN NOMBRE…. Si sigues las escrituras, estas siguiendo ríos que ya tienen nombre. Si sigues cierta religión, secta, iglesia, entonces tienes un mapa, y la verdad no puede tener ningún mapa. No puede haber ningún mapa porque la verdad es privada y no pública. Los mapas se hacen públicos; son necesarios para que también otros puedan seguir. En el mapa se muestran las autopistas, no los pequeños senderos para caminantes; y la re ligión es un sendero, no una autopista. No puedes llegar a Dios como cristiano o hindú o mahometano. Puedes llegar como tu, auténticamente tu, y no puedes seguir el camino de nadie. Y llega un momento en la búsqueda en el que uno se siente completamente exhausto, cansado. Uno empieza a pensar que hubiera sido mejor no haber empezado esta búsqueda. Uno se siente tan frustrado que empieza a tener celos de los que nunca se han preocupado por estas cosas. Esto es natural, pero es ese exactamente el momento en el que comienza la autentica búsqueda. Por eso nunca ves hippies de más de 35 años. Para entonces ya están cansados. Para entonces ya empiezan a pensar en casarse, establecerse, tener una casa. Para entonces ya empiezan a volverse serios. Para entonces ya se han olvidado de su revolución, se hacen parte del status quo; cansados, exhaustos. Es un momento esencial. Y si puedes continuar, incluso sintiéndote exhausto, cansado, frustrado, si aún puedes seguir hacia adelante, entonces se abandona la mente y aparecen los primeros atisbos de la meditación.